Hay silencios que se encadenan al olvido,
esa prolija genealogía de sudores
que descienden por la ladera de la historia,
empapando de vida el cauce de sus días.
Es la callada argamasa de los tiempos
que une y compacta la hechura de los siglos,
manos callosas, brazos poderosos
para acunar silentes el fruto de los años.
Es un enjambre de abejas innombradas,
jornaleras de la miel que otras bocas degustaron,
forjadoras de cera para ajenas luminarias,
mensajeras del polen de impuestas fecundidades.
esa prolija genealogía de sudores
que descienden por la ladera de la historia,
empapando de vida el cauce de sus días.
Es la callada argamasa de los tiempos
que une y compacta la hechura de los siglos,
manos callosas, brazos poderosos
para acunar silentes el fruto de los años.
Es un enjambre de abejas innombradas,
jornaleras de la miel que otras bocas degustaron,
forjadoras de cera para ajenas luminarias,
mensajeras del polen de impuestas fecundidades.
Mas de su entraña telúrica brotó el magma de la rabia
guardado en el seno ancestral de los mutismos
y despertó la voz en grito libertario,
y la palabra puso nombre al desconcierto.
Fraguas de libertad en latidos de esperanza
para resucitar del fango de la amnesia
la luz ignorada sin brillo y sin memoria
en uránico abrazo de azules infinitos.
Paseando hace unos días por el centro de nuestra ciudad, delante de la fachada del edificio de Correos me encontré con la significativa estatua humana que aparece en la fotografía. Era el particular homenaje de esta chica a todas esas mujeres de las que nadie se acuerda, las que no salen en los libros pero sin las cuales nada de lo que hoy tenemos hubiera sido posible. Hoy quiero traer su imagen a este blog para acompañar el poema que yo también hoy dedico a esa genealogía de antepasadas que desde su silencio forjaron nuestra historia.
Lamentable, pero sigue siendo real esta imagen en muchos lugares. Y si no lo es en muchos más, no es poque algunos no la echen de menos. Lo peor es el retroceso que se está viendo en muchos aspectos de la vida en torno a la figura de la mujer. Y aun soy más pesimista cuando veo que muchas mujeres aun siguen en el roll, no de ama de casa, que es un trabajo tan digno como el que más, sino de servidumbre al hombre.
ResponderEliminarNo podemos bajar la guardia.
Felicidades por el artículo
Inma,
EliminarA veces una imagen vale más que mil palabras... Y cuando ésta se acompaña de unnos versos tan hermosos y tristes, como la vida misma, el bello de todo el cuerpo se eriza.
Es la primer avez que entro en tu Blog y me he hecho seguidora porque mehan impresionado tu oda. Bss, Ann@
P.D. Yo también tengo un bLog, te remito mi enlace con la última publi, hay de todo un poco, por si quieres seguirlo. Muchas gracias, Bss
Amigos
Hoy día de la mujer trabajadora, no se me ha ocurrido más que asesinar a ese hombre que subyuga mis sentimientos... Por qué... porque no me merece. A partir de ahora, sólo amores reales. Bss, reíros un poco que va de coña. Je, je, je...
Ann@
http://annagenoves2012.blogspot.com/2012/03/asesinato.html
Graciás, María Dolores. Tienes razón, la servidumbre en nuestras antepasadas era terrible pero lo que es más horroroso todavía y más incomprensible es que se siga dando hoy en chicas jóvenes que están retrocediendo a posturas que deberían estar ya erradicadas.
EliminarGracias a ti también, Ann@, por tus palabras. Ya he echado un vistazo a tu blog y he comprobado que tienes una forma de escribir muy original y creativa.
ResponderEliminarGracias a ti por tu post, que también contesté,
ResponderEliminarNo creas que siempre voy de amores reales camuflados en la cibernética... Tengo seguidores que dicen que soy un Todo Terreno de la lieratura. Yo me río.
Lo único que puedo decirte es que cuando escribo,s e me olvida el resto de la existencis. Bss y muchas gracias.
SI queires puedes poner los enlaces de tu Blog en mi muro.
Ann@ Genovés